A cierto punto dejé de escucharlo.Desde que habìamos entrado en el supermercado se enredò de una manera extrana en esa absurda polémica sobre las fotos de un amigo comùn.Me repetìa sin cesar que esas fotos no daban informaciòn de la persona,y que para una pàgina de ésas,no servìan.Que parecìan fotos sacadas por Salgado a las puertas de Rochinha,una de las favelas màs populares de Rìo.
No sé còmo ni por qué siempre acababa hablando de su tierra.Hizo un descanso en su discurso acelerado y sin mirarme me dijo que se acercaba para coger un rollo de papel para el horno,y se hizo el silencio.
Compré illy ,medio kilo y dos yogures de fresa con tropezones de limòn,y llegò él.
-Hay que ensenar polla,eso es lo que estimula a los maricones,una buena polla,de esas que se cogen con dos manos y parece que aùn se te va a escapar.
Lo mandé callar.Solìamos hablar en italiano,aunque cuando terminàbamos peleàndonos la lengua de primera elecciòn para mì era el espanol,y la suya, el portuguès,pero con acento véneto,que no sé como lograba eso,pero como siempre querìa ser diferente a todo lo que le rodeaba,le salìa esa rara combinaciòn.'El siguiò dale que dale hasta la caja ocho.
Empezò a dejar sobre la cinta las cosas que habìamos comprado,sin dejar de darme mil y una razones sobre la tonterìa de hacerse ese book,de fotos de arte y ensayo ,como decìa él,pero que no servìan para lo que tenìan que servir.Yo metìa las cosas en las bolsas que me dio la amable cajera sin decir ni pìo.Y de repente suelta-esto no es nuestro senorita!-,eran mis yogures de fresa con tropezones de limòn.Son mìos,dije soltando una carcajada desenfadada,me mirò y me dijo que tenìa la cabeza a las tres de la tarde.Luego me dijo en espanol,que la cajera parecìa que llevara peluca.Pagué y nos fuimos.Pollas,pollas,eso es lo que hay que dar a estos maricones,siguiò relatando.Sonò su mòvil,la melodìa tranquilizante del Calling you de Jevetta Steele.Se parò,dijo oi!.Era su madre,y se enredò entre los notas que salìan de su lindo portugués.No hubo màs pollas en lo que quedò de dìa.